A prueba: 2015 G63 AMG

Sólo bastó una mirada.  Su porte se apoderó de la escena. Su presencia se hizo sentir. No había en él, un solo rasgo que pasara desapercibido, que no se hiciera notar. Y es que el Mercedes-Benz G63 AMG, impacta por el tamaño y por su aire de lujo y aventura en perfecta armonía.

Aunque este modelo no ha sido completamente rediseñado en su versión 2015, si se le han añadido algunas cositas como por ejemplo, sistema de entretenimiento en la segunda fila de asientos (opcional) y se ha incrementado el espacio para guardar cosas en algunos puntos estratégicos de la cabina, como en las puertas delanteras.

Es, en definitiva y pese a su aire de todo terreno para uso militar (el look es innegable), un SUV para cinco pasajeros, de muy buen tamaño. Siendo miembro de la Clase G de Mercedes-Benz, puede usted contar con una buena aceleración y una cabina con detalles lujosos, en la que se mezclan la madera –toque tradicional y clásico- con sistemas de avanzada tecnológica.

En la cabina, es cómodo y espacioso. Pese a que hay algunas áreas para llevar objetos, me gustaría ver alguna más… y lo mismo vale para los apoya vasos, pero por lo demás, me resultó muy confortable. El área de carga brinda 45 pies cúbicos que pueden expandirse un poquito más si se abaten las butacas de la segunda fila, llegando a 79,5 pies cúbicos.

Es un vehículo pesado y su solidez se siente cuando uno lo maneja. Pese a eso, como mencioné antes, tiene una buena respuesta en la aceleración, más parecida –de hecho- a la de un auto que a la de un vehículo de estas dimensiones. Eso sí, con ese peso, se precisa espacio para la frenada. Téngalo en cuenta si lo conduce. También llamó mi atención de forma positiva cómo está distribuido ese peso y cómo el centro de gravedad le confiere seguridad y estabilidad en curvas.

El Mercedes-Benz de la Clase G se ofrece en dos versiones: G550 y G63 AMG, que fue el que tuve para la prueba.

El G550 ofrece, estándar, llantas de aleación de 18 pulgadas, acceso y encendido sin llave,  luces antiniebla, luces LED, techo panorámico, espejos retrovisores externos plegables, limpiaparabrisas automáticos, cámara posterior, sensores posteriores y frontales para ayudarnos en maniobras de estacionamiento, sistema de alerta de tráfico en punto ciego, control dual de temperatura, tapicería en cuero, funciones de memoria para las preferencias de más de un chofer, 10 ajustes posibles para la butaca del conductor, asientos frontales con calefacción y ventilación, volante telescópico. También cuenta con el sistema de integración COMMAND, cuyas funciones confluyen en una pantalla táctil de siete pulgadas. Permite contar con comandos por voz y sistema de navegación, y si nos enfocamos en lo que a entretenimiento se refiere, este vehículo cuenta con un sistema de audio Harman Kardon de 12 parlantes. Y claro, además hay puerto de conexión USB y otro para audio.

Al dar el paso al G63, las llantas pasan a ser de 20 pulgadas, la tapicería en cuero es aun de más alta gama, el motor es turbo y encontramos diseños propios de AMG.

Entre los elementos opcionales, hay diversos estilos para las llantas, volante con calefacción y hasta tapicería con costuras en forma de diamante.

En ambos casos, las opciones de motor son V8. El G550 cuenta con un V8 de 5,5 litros que entrega 382 caballos de fuerza y 391 libras por pie de torsión. La transmisión es automática, de siete velocidades, 4WD y sus numeritos de consumo se ubican en 12 millas por galón en la ciudad y 15 en la autopista.

El G63 AMG es un V8 turbo que puede brindar 536 caballos de fuerza y 560 libras por pie de torsión. La transmisión es automática de siete velocidades y el consumo, promedio, está en las 13 millas por galón.

Equipado correctamente, puede remolcar hasta 7.000 libras.

En materia de seguridad, cuenta estándar con frenos a disco antibloqueo en las cuatro ruedas, control de estabilidad y de tracción, bolsas de aire laterales y frontales. Tal como ya mencioné, también se incluyen en este segmento los sensores para maniobras de estacionamiento, sistema de asistencia en pendientes, cámara posterior, alerta de tráfico en punto ciego y sistema de alerta de emergencias mbrace2, propio de Mercedes-Benz.

El precio de este Mercedes-Benz arranca en los USD119.900 y el modelo G63 que tuve para la prueba, incluyendo opcionales, llegaba a los USD138.075.

Si desea saber más de este u otros modelos de Mercedes-Benz, por favor visite: Mercedes-Benz


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