Cuando me dijeron que aquel día recibiría un Prius, no me especificaron cuál. Pensé inicialmente que sería alguno de los más pequeños y me sorprendí gratamente al asomarme a la puerta y encontrar el modelo V, un poco más ancho –una pulgada-, un tanto más largo –seis pulgadas- y tres pulgadas más alto que el resto de sus familiares, pero con la ya tradicional eficiencia en materia de consumo de combustible de este híbrido que se ha ido abriendo paso en su segmento.
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Y es que es el tema del consumo y no el del tamaño lo que más destaca cuando uno comenta con amigos y familiares, qué vehículo ha tocado para la prueba de la semana…
Con un motor de gasolina de 1,8 litros y un motor eléctrico, el Prius genera 134 caballos de fuerza y 153 libras por pie de torsión para brindar 44 millas por galón en la ciudad y 40 millas por galón en la carretera.
Al volante, el Prius V se siente estable, el andar suave y en general, es un vehículo cómodo. Tal como en el caso de otros Prius que he probado antes, mi primera reacción fue buscar la palanca de cambio de marchas entre las dos butacas de la primera fila y de inmediato recordé que en este auto hay que estar abierto a los cambios… así pues, el selector de marchas está en el panel central, justo al lado derecho del volante.
Para quienes buscan un poquito más de “sabor” al manejar, pueden seleccionar el modo “power” que entrega algo más de potencia, aunque existen otras dos opciones: EV y ECO. Tanto estos controles como el selector de cambios y el resto de los botones y perillas para determinar funciones, están todos a la mano.
El Prius es muy amigable y no hay en él grandes misterios. Tampoco hay ostentaciones innecesarias. El Prius V se distingue por su aspecto sencillo. De los primeros que tuve ocasión de probar, a los actuales, ha habido una mejora en cuanto a los materiales, algo que se nota principalmente en las piezas plásticas que en la actualidad se sienten más sólidas y más suaves al tacto. Otro aspecto que me gustó fue que a medida que evoluciona, el Prius mejora la distribución de espacios para apoyar las llaves, o un vaso o el teléfono celular.
Con un sistema que integra información, conectividad y entretenimiento, EnTune, y con opciones como acceso a Pandora o MovieTickets por mencionar un par, las salidas son siempre placenteras.
El Prius V está disponible en tres modelos: Two, Three and Five.
El modelo estándar cuenta con llantas de aleación de 16 pulgadas, volante que sube y baja y que también es telescópico, control de velocidad crucero, acceso y encendido sin llave, un sistema de audio de seis parlantes que cuenta también con CD, conexiones USB y telefonía manos libres.
El modelo que sigue, Three, añade a lo anterior la radio satelital y la de alta definición. También la cámara retrovisora y el sistema EnTune. Y un paso más allá, está el Five, que tiene luces antineblina, llantas de mayor volumen -17 pulgadas- y tapicería SofTex (una alternativa que presenta Toyota a los tapizados en cuero).
Algunos elementos como techo panorámico, control de velocidad crucero adaptable, sistema de navegación mejorado o estacionamiento paralelo automático, entre otros, pueden encontrarse en los paquetes opcionales.
En materia de seguridad el Prius V cuenta, estándar, con frenos de disco antibloqueo, control de estabilidad y control de tracción, bolsas de aire frontales y para las rodillas del conductor, además de bolsas laterales tipo cortina. También cuenta con anclajes para las sillas de los niños y con control de presión de aire en los neumáticos.
En las pruebas de choque del gobierno el Prius V obtuvo cinco estrellas –máximo posible- en general y en impactos laterales, y cuatro estrellas en impactos frontales y volcamientos.
El precio del Toyota Prius V arranca en los USD26.750 y el modelo que nos tocó para la prueba llagaba a USD37.411 incluyendo paquetes opcionales.
Si desea saber más sobre este u otros vehículos Toyota, por favor visite: www.toyota.com.
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